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ISSN 1989-4163

NUMERO 43 - MAYO 2013

La Dicha

Emperador Yongzheng (1723-1735)

Extacto de la "Carta del Padre Contanztin, Misionero de la Compañía de Jesús: al Padre Duhalde de la misma Compañía. Cantón a 19 de octubre de 1730". Tomo XIII de "Cartas edificantes, y curiosas, escritas de las Missiones estrangeras, y de Levante por algunos Missioneros de la Compañía de Jesús". Edición de MDCCLVI

 

Instrucción del Emperador, dada con ocasión del carácter Chino, que significa “dicha”.


Queriendo el Emperador honrar a un Mandarín Principal de Fongtianfu, Ciudad considerable entre las de primer orden, Capital de la Provincia de Leaotong, y Corte antigua de los Tártaros, antes que conquistasen a la China, escribió de su mano en el principio del año el carácter “Fo”, que significa “dicha”, y se lo remitió. Como es de distinción en una familia, se respeta, se conserva con cuidado semejante regalo Imperial, y se coloca comúnmente en la Sala exterior de Visitas. Dio gracias a su Majestad el Mandarín, y en cumplimiento se sirvió de esta expresión: “Era yo un hombre nacido en la desdicha, y acaba V. Mag. de hacerme dichoso”. Le respondió el Emperador lo que sigue.

“La dicha ha sido siempre aligada al ejercicio de la virtud. Nacieron todos los hombres para ser dichosos; y ninguno, sea quien fuese, puede decir con verdad, que ha nacido para ser infeliz. Entre los que poseen grandes riquezas, y los primeros honores, se hallan infelices; y entre los que viven en el olvido, y en la pobreza, se ven muchos dichosos. Se quejan muchos de ser desdichados, pero su mayor desgracia consiste en no averiguar bien el manantial de su felicidad. Arreglarse sobre las honras, y las riquezas, sobre el desprecio, y la pobreza, para discernir, y determinar la felicidad, o infelicidad, es ignorar en qué consiste la verdadera dicha. Si quiere el hombre ser dichoso, su felicidad depende de él mismo; está en sus manos; no depende del Emperador: ¿cómo podría hacerle dichoso? Ejerciendo el bien, se fabrica su propia felicidad. Es el único origen de ella; y así, cuando en la Corte, o fuera de ella envío a los principales Oficiales, el carácter que significa “dicha”, mi intención es, que a la vista de ello, entres en ti mismo, cumplas con tu obligación, pienses que hay una verdadera felicidad, y trabajes con una sabia conducta a conseguirla. Erraste si creíste, que podía Yo hacer a un hombre dichoso”.

 

Yongzheng

 

 

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